A primeros de este año, las cifras del sector inmobiliario dominicano eran de lo más esperanzadoras de cara al resto del 2020. Esto lo demuestran datos como los ofrecidos por la Presidenta de la Asociación de Empresas Inmobiliarias (AEI), Claudia Castillo. Entre estos, podemos destacar:
Esta situación tan favorable del sector inmobiliario en la República Dominicana tiene diversos causantes. Entre ellos, destacamos las iniciativas que han tomado las instituciones públicas en favor de la adquisición de viviendas.
Por una parte, podemos destacar la Ley 189-11 para el desarrollo del mercado hipotecario y el fideicomiso en la República Dominicana. Según su segundo artículo, sus objetivos principales son:
Artículo 2.- Objeto de la ley. La presente ley tiene por objeto crear las figuras jurídicas necesarias y fortalecer las existentes, para poder desarrollar el mercado hipotecario dominicano, canalizando recursos de ahorro voluntario u obligatorio, para el financiamiento a largo plazo a la vivienda y a la construcción en general, profundizando el mercado de capitales con la ampliación de alternativas para los inversionistas institucionales y fomentando el uso de instrumentos de deuda que faciliten dicha canalización, lo que, unido a la creación de incentivos especiales, aportes del Estado y economías de procesos, sirvan para promover proyectos habitacionales, especialmente los de bajo costo, así como fomentar el ahorro para la adquisición de viviendas por la población, a fin de mitigar el importante déficit habitacional en la República Dominicana.
Además, también destacamos el Bono ITBIS o de Viviendas de Bajo Costo, que constituye el 8% del valor de la vivienda para las familias que se van a hacer con su primer hogar. De esta forma, se compensa el Impuesto sobre Transferencias de Bienes Industrializados y Servicios.
También merece la pena destacar los fideicomisos para la construcción de viviendas de bajo costo. Con ellos, los proyectos pueden exonerarse del pago de ciertos impuestos.
Por último, entre las ayudas del Estado para la adquisición de una primera vivienda de bajo costo, tenemos el Bono Tierra. Con éste, el comprador quedará libre de pagar la fracción del precio de la vivienda correspondiente al terreno sobre el que se ubica.
Volviendo a las reflexiones de la máxima responsable de la Asociación de Empresas Inmobiliarias, esta propone un escenario más que probable para el sector inmobiliario post crisis sanitaria.
Según comenta, la actual coyuntura supondrá sólo un paréntesis para la tendencia favorable del mundo de la vivienda en la República Dominicana. Entre los motivos que sustentan esta previsión, están:
Además, se remarca la importancia que tendrá la transformación digital para el sector. Entre estas acciones de digitalización, tenemos:
Dentro del nuevo paradigma que supone la nueva normalidad para las inmobiliarias, la firma electrónica es un elemento fundamental. Esta es aplicable en múltiples circunstancias dentro de la actividad rutinaria de estos negocios. Entre ellas, podemos destacar:
En conclusión, el sector inmobiliario dominicano espera una vuelta a la tendencia favorable mostrada hasta la crisis sanitaria. Eso sí, para conseguirlo, se hace clave la adopción de soluciones digitales.
Entre ellas, se encuentran las de firma electrónica y autenticación, fundamentales para la gestión de todos los documentos implicados, tanto con clientes, como con otros negocios y con los organismos públicos.